La Casa Dimir es uno de los diez gremios de Ravnica, el más
secreto y oculto de ellos. Está repleto de secretismo, manipulación y trabajos por debajo de la mesa, siendo una
organización operando desde las sombras
y la cual siempre termina torciendo las cosas a su favor.
El gremio provee espionaje, robo, hurto, contra
inteligencia, asesinatos y otros servicios
ilegales para la población de Ravnica en general, si se tienen para
pagar su precio y si los logran encontrar. Siempre que alguien en Ravnica
contrata a un mercenario o un asesino, siempre cree que está contratando a una
persona sin gremio, pues por regla del propio gremio, un Dimir siempre debe
negar que lo es, aunque a veces, si les es oportuno se pueden hacer pasar por
miembros de otros gremios, especialmente Rakdos en el caso de los asesinatos.
El gremio es tan secreto
que incluso los agentes de menor rango no saben con certeza para quien
trabajan o si quiera que estén en un gremio ellos mismos.
Los Dimir más expertos son conocedores de la trasmutación,
la cual les permite cambiar objetos u elementos naturales por otros de un valor
similar, aunque esto signifique la pérdida del objeto original.
También son expertos en pasarse mensajes cifrados que solo
ellos pueden descifrar; por lo que estos mensajes, siempre que sean útiles, no
son destruidos o eliminados, pudiendo ser usados varias veces ya que de todas
formas, para quien no sea un Dimir, vera solo garabatos inentendibles.
Aun así, su verdadero poder está en la red de espías,
asesinos y ladrones que mantienen el poder en Ravnica siempre cambiando de
manos.
La casa dimir fue fundada por el ancestral vampiro Szadek.
El vampiro fue uno de los diez parums que firmaron el primer Guildpact y quien
permaneció en su puesto como Parum y Guidmaster por 10’000 años.
Una de las cláusulas cruciales en el primer Guildpact fue
que ninguno de los firmantes, incluido el propio Szadek, podría revelar la
existencia de la casa Dimir a la gente común de Ravnica, protegiendo asi el
anonimato del gremio a la vez que les forzaba a ellos a mantenerse ocultos.
Esto creo una falla en el Guildpact la cual eventualmente
llevaría a su rompimiento. Si esto fue previsto o no por Szadek se desconoce
con certeza, pero se cree que el había visto el fallo en el contrato de Azor I
y así uso este por si algún día el pacto le dejaba de ser útil.
Oficialmente el gremio conocido como la Casa Dimir no existe
y es así que la gente normal de Ravnica cree que en el plano tan solo existen y
siempre han existido solo nueve gremios, siendo el décimo gremio un recuerdo de
tiempos muy antiguos.
El propio nombre Dimir no es conocido por la mayoría y
quienes han escuchado el nombre solo lo toman por un mito, una historia que se
usa para que los niños se porten bien y se vayan temprano a la cama; y cuando
aparece uno tratando de convencer al resto de su existencia, por lo general es
ignorado y tomado por loco para después aparecer muerto en algún callejón oscuro.
Esta visión del gremio es promovida por los mismos Dimir
para quienes la ignorancia de la gente es su más poderosa arma.
El gremio opera bajo la regla de saber estrictamente lo
necesario y no hacer preguntas, contratando así ellos a mercenarios sin gremio,
quienes al tiempo de estar trabajando para ellos se les considera parte del
gremio. Si se muestra digno de confianza, se le revela no solo que existe la
Casa Dimir, sino también que él ya es un miembro.
Solo los líderes entre los Dimir saben todo sobre las
actividades del gremio, conocen a todos sus agentes y saben cuál es su plan
final. Entre ellos, los necrosabios son los más importantes, siendo los únicos
quienes tienen una posición fija en su salón secreto de Duskmantle.
Ellos manipulan el flujo de información, dando a conocer o
manteniendo en secreto lo que llegan a conocer según les convenga.
Pocos individuos tienen el permiso de reunirse con los
líderes, en vez de eso, envían la información por una intrincada red de
intermediarios hasta que esta llega a alguno con el rango suficiente como para
darlo a conocer a sus líderes.
Los agentes de campo son por lo general los miembros de
menor rango del gremio, siendo solo matones contratados en callejones para
hacer ciertos trabajos sucios.
Los Guilmages Dimir usan su magia para influenciar la mente
de otros. Pueden enviar mensajes telepáticos a ciertos operativos a distancia o
provocar la amnesia o perdida de ciertos recuerdos de otros.
Los Dimir también son grandes necromagos, logrando reanimar
a sus víctimas, teniendo así un gran número de espectros o esqueletos
trabajando para ellos. Ellos son creados sin conciencia y tan solo pueden
seguir misiones asignadas, por lo que de ser capturados en alguna actividad,
suelen culpar a otro gremio como los Rakdos o Golgari.
Los espíritus también son ampliamente utilizados por los
Dimir para pasarse mensajes, siendo especialmente buenos en esto debido a su intangibilidad
e invisibilidad, por lo que es muy difícil atraparlos. Algunos de ellos también
son usados para poseer a ciertos individuos tales como oficiales, jueces o
senadores. Nadie se escapa del alcance de la Casa Dimir.
El reinado del Szadek termino cuando este manipulo a Savra y
al conclave Selesnia con el propósito de asesinar a Mat’Selesnya. Durante la
celebración del Decamilenio, Szadek, con Savra y un grupo de Shapeshifters,
entraron a Vithu Gazi y allí asesinaron a Mat’ Selesnia y casi destruyen por
completo al Conclave, pero la llegada de Agrus Kos lo evito y así Szadek fue
capturado y ejecutado por la propia mano de Agrus Kos.
Cuando el pacto se comenzó a desmoronar y llego la época de
la Disensión, los otros gremios creyeron que de hecho ya los Dimir habían
desaparecido del todo; sin embargo se supo que estos habían tomado la calle
Agyrem, la cual ahora estaba controlada por Szadek, quien ahora era un espíritu
y tenía la potestad de controlar otros espíritus. Con esto los Dimir no solo
dejaron claro que aun existían, sino que eran fuertes y operacionales.
Años después, cuando Teysa Karlov hizo a los gremios firmar
un pacto no mágico; ella no agrego a los Dimir creyéndolos desaparecidos hace
mucho; sin embargo, no era así y la casa Dimir aún se mantenía activa bajo el
mando de un nuevo Guildmaster; Lazav.
Cuando se dio la carrera del laberinto, esto revelo la
existencia del gremio para la gran mayoría de las personas de Ravnica, por lo
que su secretismo se vio súbitamente terminado. Ahora, obligados a poseer un
rostro publico los Dimir han tomado un nuevo rol en la ciudad y son ellos
quienes manejan la información, siendo sus miembros de bajo rango los
archivistas, escribas, investigadores, reporteros y archivistas del plano, lo
que pone en sus manos toda la información; dejando a los ladrones, asesinos y
espías de la Casa Dimir como un viejo recuerdo que algo ya no existe; justo
como a ellos les gusta.
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