Los ungidos les rodearon y Liliana no pudo controlarlos.
Jace arranco un cartucho del pecho de uno de ellos, pero este solo se desplomo
al suelo.
Antes de ser capturados llego Temmet, quien controlaba a los
ungidos y les salvo, pero esto hizo resurgir la desconfianza en el por aquellos
extranjeros.
Liliana exploto y le dijo a Temmet la verdad, sobre ellos y
sobre Nicol Bolas. Jace en ese momento trato de tomar el control de la mente de
Temmet, pero este de alguna forma parecía tener algún tipo de protección.
Temmet les dijo a su vez que el había revisado los archivos
de Kefnet y que no había hallado rastro de sus nacimientos. Temmet ya tenía suficiente
con estos blasfemos y los ungidos de nuevo se fueron contra ellos, pero
entonces los ojos de Temmet se volvieron azules al momento que Jace, logrando
evadir las defensas de este, había tomado control de su mente.
Jace apenas lograba mantener el control sobre Temmet, por lo
que salieron de allí rápidamente.
Justo entonces, Gideon, quien se había hecho amigo de otro
participante de las pruebas, Djeru, acompaño a este a la prueba de Bontu; pero a Gideon esta le pareció
grotesca, por lo que decidió no participar.
En ese momento Chandra y Nissa llegaban al templo de Kefnet.
Un ángel, masculino y de ojos negros
llega y Nissa se estremece, ya que los ojos negros y la esencia de aquel ángel
por algún motivo le recordaron profundamente a Emrakul. El ángel la inquieta
aún más al despedirse diciéndole que el poder es algo que se debe tomar y que
si ella está preparada para tomar; y se aleja preguntándole si ella es una
reina o un peón.
Justo en ese momento, aparece Kefnet frente a ellas
dos. Chandra no siente nada especial,
pero Nissa cae de rodillas como lo había hecho Gideon, y Kefnet entonces le
pregunta, que es lo que busca. Ella en un susurro dice, conocimiento.
Kefnet entonces le respondió diciéndole que solo los dignos
merecen conocimientos, los indignos la nada.
Entonces la mente de Nissa se ve nublada por Kefnet, pero ella logra
mantener el control a fijar su atención en las Leylines en el templo y descubre
que todas estas convergen en Kefnet.
Ella nota que las Leylines de Kefnet están alteradas de alguna y forma y
con su máximo esfuerzo, logra mover una de estas, dejando al dios confuso.
Cuando Kefnet se recuperó de su asombro, le dijo a Nissa que
había pasado la prueba y desapareció. Al
salir del templo se sintió más sabia, aunque no había aprendido nada nuevo,
además de que ahora sentía no solo el mana verde fluir a través de ella, sino
también el azul.
Los Miembros de la Gatewacht guiados por Nissa buscaron los
sarcófagos y liberaron a los prisioneros, pero en ese momento llego Hazoret.
Samut confronto a la diosa y le dijo que Nicol Bolas era un
mal foráneo y que era el quien había vuelto a Amonkhet en una máquina de
muerte. Hazoret se cansó de estas herejías y usando su poder desmayo a todos
los presentes, incluyendo a los demás que habían sido liberados junto a Samut.
Al despertar todos se vieron en una gran arena, con
cartuchos en sus cuellos que controlaban sus emociones y movimientos. Así, dio
comienzo la última prueba, la prueba del sello. Los elegidos de Hazoret
deberían combatir a los traidores por su gloria.
Sin poder hacer nada, los miembros de la Gatewatch se vieron
obligados a combatir, incluso uno contra otro. Aun así, Samut trato siempre de
proteger a Djeru, por lo que en cierto punto de la contienda, Hazoret detuvo la
batalla y llamo tanto a Samut como a Djeru, hallándoles a ambos dignos.
Samut se niega, pero Djeru avanza gustoso ante la lanza de
la diosa, pero antes de que esta golpeara a Djeru, Gideon se interpuso creando
un escudo de mana y Samut se había arrojado para apartar a su amigo del camino.
-Gideon, maldito es aquel que olvida su pasado. He visto tu
muerte Kytheon Iora, tú no eres un dios.- le dijo Hazoret a Gideon tras esto.
Justo en ese momento, el segundo sol entro en medio de los
picos.
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